En el segundo trimestre de 2019 la tasa de emancipación residencial de las personas entre 16 y 29 años en España es la más baja registrada desde 2002 (18,6%). Así lo corroboran los datos aportados por el Consejo de la Juventud de España, en la presentación de su Observatorio de la Emancipación para el primer trimestre de 2019.
El comportamiento de los mercados de empleo y vivienda en España parecen ser las dos variables que con mayor intensidad explican este bajo índice de emancipación. A nivel coyuntural, el segundo trimestre de 2019 ha continuado la senda de 2018, cuando la creación de empleo entre la población joven empezó a ir acompañada de una reducción de la temporalidad. No obstante, esta mejora no se ha traducido, al menos por ahora, en una incorporación significativa de personas jóvenes al mercado de trabajo. Las personas entre 16 y 29 años siguen distinguiéndose por su mayor temporalidad (55,3%), tasa de paro (24,8%), subempleo (15,8%) y realización de jornadas a tiempo parcial.
Las cifras de pobreza y capacidad adquisitiva de la población joven continúan siendo alarmantes. El 33,8% de los jóvenes que residen en España son pobres (30,5% de los hombres y el 37,2% de las mujeres) e incluso el 22% de las personas jóvenes que están trabajando.
Incluso gozando de una relativamente sólida posición laboral, las probabilidades de acceder a una primera vivienda por parte de las personas jóvenes son actualmente limitadas. En el primer trimestre de 2019, el importe inicial de una cuota hipotecaria ascendería al 62,4% de salario neto de una persona joven. La solvencia económica que pueden acreditar las personas jóvenes no suele ser suficiente ni para hacer frente a la entrada necesaria para financiar la adquisición de una vivienda (equivalente a 4,4 veces el salario anual que percibe una persona joven en 2019).
En el supuesto del alquiler, el acceso a una vivienda parece ser igualmente inalcanzable para las personas jóvenes debido a la escasez de la oferta, la asimetría en el poder de negociación entre arrendatario y arrendadores e indudablemente, la subida constante que están experimentando las rentas en el mercado libre. Como media, un joven debe dedicar alrededor del 94% de su salario neto al pago del alquiler.
Desde el Consejo de la Juventud califican la emancipación juvenil como una situación prácticamente ficticia. Es de vital importancia, remarcan desde el organismo, que se tomen medidas de regulación en el mercado de vivienda y se lleven acabo acciones para garantizar el acceso de las personas jóvenes a la misma (habilitación de parque público, regulación del precio de los alquileres, ayudas a la emancipación, etc.).
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